¿En qué se diferencia un coworking de un centro de negocios?

¿En qué se diferencia un coworking de un centro de negocios?

Entre anglicismos como brainstorming, feedback, branding o engagement, dentro del área de trabajo también nos encontramos con un término que hace referencia al lugar donde realizamos nuestra actividad: coworking.

Tendemos a pensar que cada una de estas palabras tiene su propio término en castellano como “lluvia de ideas”, “respuesta” o “imagen de marca” y así, relacionar coworking con “centro de negocios” pero ¡esto es un grave error! Estos dos últimos términos a los que nos referimos nacen de necesidades totalmente diferentes y aunque tienen similitudes, son dos caras de una misma moneda. ¡Vamos a ver en qué se diferencian!

Diferencia entre coworking y centro de negocios

¿Qué es un coworking?

Un coworking te ofrece un espacio de trabajo con todo el equipamiento necesario para desarrollar tu labor profesional, con la peculiaridad de que dicho espacio está compartido.

Podemos afirmar que es una única oficina compartida en la que los empleados se dan cita para trabajar. Estos espacios tienen el objetivo de intentar conectar y crear oportunidades profesionales entre las personas que cohabitan en él.

En un coworking suelen ubicarse profesionales que no necesitan más que un ordenador portátil, un teléfono y buena conexión para realizar su trabajo. ¿Algunos ejemplos de estos perfiles? Programadores, diseñadores, gestores de comunidades online, periodistas, profesionales del marketing digital o comerciales.

La gran diferencia que tiene el coworking con respecto a los centros de negocio y las clásicas oficinas compartidas es la figura del gestor. Este es una persona que trabaja para que los miembros de ese espacio se conozcan mejor y así generar un clima de confianza con dinámicas de colaboración.

El coworking está dirigido a personas flexibles y que buscan un espacio profesional donde realizar su trabajo, sin las obligaciones que suponen tener una oficina personal e individual.

¿Qué es un centro de negocios?

Un centro de negocios es un edificio que alberga varias empresas o negocios y donde estos realizan su actividad laboral. Se divide en diferentes oficinas que se alquilan a empresas a las que no les interesa adquirir un establecimiento propio totalmente individual.

Cada profesional tiene su propia oficina en la que trabaja con intimidad y como añadido, en el centro de negocios hay una serie de servicios compartidos, como, por ejemplo, una sala de reuniones, una sala de espera o un espacio dedicado al ocio y al descanso de los trabajadores. Esto ayuda a ahorrar costes y le evita al emprendedor tener que estar preocupándose de los aspectos relacionados con la gestión del lugar en el que ejerce su actividad.

En resumidas cuentas, el centro de negocios facilita a otros profesionales independientes el adquirir una oficina con todos los servicios necesarios para comenzar y desarrollar su actividad profesional.

En resumen…

Ya tenemos claro qué es tanto un coworking como un centro de negocios y las diferencias fundamentales entre ellos son las siguientes:

• El coworking es un espacio de trabajo compartido en el que los emprendedores alquilan puestos para trabajar. No hay oficinas separadas, porque aquí lo que se busca es la interacción entre todos los que trabajan en el mismo sitio.
• Por el contrario, el centro de negocios es un edificio que alberga diferentes oficinas separadas entre sí, donde prima la privacidad. En este caso, solo cohabitan los miembros de una misma empresa.
• El coworking es un espacio de trabajo más informal. De hecho, ¿sabías que en algunos coworking incluso se admiten mascotas? También es habitual que los gestores de los espacios de coworking organicen eventos para que los emprendedores puedan conocerse y entablar relaciones personales e incluso profesionales.
• Los centros de negocios son espacios más formales y no se busca tanto la interacción entre trabajadores de diferentes empresas. En este caso, la empresa y sus trabajadores buscan buena calidad en las instalaciones y un sitio agradable y cómodo donde asentarse.

¿Qué modelo se adapta más a tus necesidades?

¿Has decidido ya cuál de los dos modelos te convence? Cada uno tiene sus virtudes en función de tus propias necesidades, pero en lo que sí coinciden es que ambos son espacios completamente válidos para desarrollar el ejercicio laboral. Solo te queda escoger uno (¿has echado un vistazo a nuestros espacios?) ¡y a trabajar!